¿Por qué mi perro tiene rivalidad?

Todos aquellos quienes hemos tenido el placer de convivir con un perro, hemos presenciado en una o más ocasiones los gruñidos o ladridos que entre ellos se realizan; la gran mayoría de los tutores ignoran este tipo de comportamientos, sin embargo, en el momento en el que estas conductas pasan a ser más frecuentes y/o agresivas es cuando nos surge la pregunta ¿por qué mi perro tiene rivalidad con otros perros? 

Hay varias respuestas para esta misma pregunta, todo depende si son perros de diferentes dueños que eran amigos, o si son perros de la misma manada, o si es entre perros que se ven por primera vez. Pese a que hay diferencias en cada uno de los casos, en todos ellos hay una constante, y es el recuerdo.

Por ejemplo, en el primero de los casos, cuando dos perros vecinos que son amigos y comienzan a tener actos de irrespeto como mordiscos, monturas o dominación, es común ver que uno de los tutores al observar gruñidos o ladridos, entre a defender a su can, provocando el estallido de una pelea. Este tipo de acontecimientos suelen detonarse nuevamente debido a apoyos corporales o verbales inconscientes de parte del tutor, haciendo que el recuerdo se reavive. 

Por otra parte, en los casos donde esta rivalidad surge dentro de perros de la misma manda, es muy importante recordar que no es lo mismo tener un perro a tener dos perros, en este orden de ideas, si uno de los canes es sobre estimulado por el tutor, este se sentirá apoyado por el humano, provocando en los caninos una disputa por el espacio. Ahora bien, es importante aclarar que dicha rivalidad no estalla por el perro que no ha sido sobre estimulado sino por el perro que ha sido sobre estimulado, ya que este se siente con la autoridad de apoderarse de los espacios comunes. 

Por su parte, los caso de perros que generar una rivalidad con otro perro que nunca han visto, suelen basarse en ataques o agresiones recibidas previamente por perros de contextura o raza similar a la que se está avistando; también ocurre por la tensión de la correa en el justo momento del encuentro entre los perros. 

Resolver este tipo de disputas no es nada fácil, por lo tanto es comprensible si te sientes frustrado, ya que en casos como en el de los miembros de la misma manada, es importante la evaluación de un experto, esto se debe a que cada perro es un universo. 

Sin embargo, en el primer y último caso existen datos que te pueden ayudar a mejorar la relación. En el primer caso, por ejemplo, al ser una actitud muy común en perros cachorros y jóvenes, puedes generar una caminata entre los dos canes, ambos con correas largas o caminado sueltos, ellos deben ir enfocados en la caminata, por lo tanto no les debes permitir jugar, esta actividad debe finalizar con los dos perros en un estado de calma.

Por otro lado, cuando se trata de perros que nunca se han visto e instantáneamente generar una rivalidad, es importante que analices si los gruñidos o ladridos son por un comportamiento agresivo o si es por la ansiedad de jugar. Permítele a tu perro realizar actividades con otros perros cercanos, cuando lo notes en un estado de calma, dale espacio para que conozca al otro perro, es muy importante que intentes no intervenir en el desarrollo de este contacto. 

Ten en cuenta que estos datos solo son validos en los casos donde la rivalidad se da por medio de gruñidos o ladridos; en los casos de agresión física es muy importante que consultes con un experto, como los de Victor Canes.

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